Vos, yo, uno mas uno

Hoy uso la letra de esta hermosa cación porque expresa exactamente lo que necesita expresar

Muchas veces en mi vida quise
aunque hubiera que ocultarse quise
con engaños y traiciones quise.

Sin tener en cuenta al otro quise,
aunque no fuera querida quise
tantas veces en mi vida quise.

Pero quise mal, quise mal, pero esta vez
voy a aprender a quererte
no hay más tiempo que perder
la vida corre y no espera
al que se queda.

Aprendamos a querernos, a amarnos,
a cuidarnos del dolor.
Yo te enseñaré a quererme,
enséñame por favor
a amarte, besarte, cuidarte,
mirarte, sentirte, extrañarte, esperarte...

vos, yo, uno más uno dos,
vos, yo, uno más uno tres,
vos, yo, uno más uno cuatro,
aprendamos a querernos,
vos, yo, uno más uno cinco,
aprendamos a querernos,
vos, yo, uno más uno seis,
aprendamos a querernos,
uno más uno, más uno más uno más uno
más uno...

Marilina Ross

Dos

Si te confieso mi amor, no me escuches,
no te detengas ni te voltees,
tus ojos en el vacio no veran nada,
solo la sombra de una sombra, el reflejo de un reflejo entre la niebla.
y el susurro de mi voz ya perdido para siempre
sera en un eco incomprensible en los pasillos circulares de una memoria lejana,
las palabras fragmentadas, derrumbadas, una pila de escombros abandonada,
ya no cruzaran el abismo en busca del refugio de tu mirada,
solo esperaran aqui, a mi lado, en quieto reposo,
a que des vos el ultimo paso,
porque ya estas tan cerca, si acaso ya pueda sentir tu piel perfumada,
estirando la mano, acercandote al abrazo de esta prohibida danza,
bailada de a dos, de a dos en la cama.

Tres

Es facil decir que solo faltan tres,

ya no quiero enumerar, ni contar

un número es solo un numero y no algo que se pueda hablar.

Prefiero los sentidos, que me permiten tocar,

deliciosas formas definidas, del verbo amar,

ver entre las ansiadas sombras

un recuerdo de tu silueta, sin necesidad de soñar,

gustar el salado de la piel y el salado del mar,

vestigios que revelan orígenes de profundidad.

Y todo o casi todo, reducido a esta eternidad

solo faltan tres noches, tres noches mas de esperar.

Cuatro

Cuatro

A cuatro dias reducida esta cuenta regresiva
reticente enumeracion cuantitativa de la espera
suma, cuenta,
inutil, vana...desesperada.
Ya no puedo desenmascararme mas, ya estoy desnudo,
vacio de palabras,
rendido en tu ausencia al vacio de mi cama,
a tientas explorando entre lo oscuro de la noche
los pliegues misteriosos de las sabanas
tratando de encontrar un hueco, un relieve
que recuerde a mis manos esas formas familiares,
impresiones que en mis dedos dejaron
esas curvas peligrosas, contornos de piel sueve.

Cinco

Cinco noches, que duelen como rastros de lágrimas secas,

es la distancia que hoy,

separa el toque mágico de tu piel

de mis dedos temblorosos

que a tientas y en absoluto silencio te quieren recorrer.

Cubrirse los ojos del sol y esperar,

sentarse resignado en el cordón de la calle y suspirar,

mirar repetidamente el reloj y anticipar,

nada mas me queda,

nada mas.

Seis

seis noches largas, es la espera,

seis noches de oscuridad y pena,

sin mañanas, sin un sol que nos caliente en esa oscuridad

que se llama ausencia.

solo seis noches, incontables horas como granos de arena,

húmeda arena que no se escapa entre las las manos abiertas

y no se restan.

seis noches y sus dias que se alargan y nunca terminan

infinitamente seis, incontablemente seis.

casi, solo casi, ya no puedo

seguir contando la demora

pero espero, ay! sí, como espero

respirar tu aliento

someter tu cuerpo deliciosamente confundido con mi cuerpo.